La Real Fuerza Aérea Saudí participa en el ejercicio Sindh Shield 2024 en Pakistán
Cita de Comandante en 7 de octubre de 2024, 18:48Arabia Saudí está mejorando sus relaciones intergubernamentales y militares con Pakistán, participando en el ejercicio Escudo del Indo 2024. Como parte de esta colaboración, la Real Fuerza Aérea de Arabia Saudí [RSAF] ha desplegado seis aviones Panavia Tornado Tactical Strike Fighter [IDS]. Junto a Arabia Saudí y Pakistán, Egipto y Turquía también aportan sus cazas al ejercicio.El ejercicio Escudo del Indo 2024 está diseñado para reforzar la cooperación militar y facilitar el intercambio de conocimientos entre las fuerzas aéreas de los países participantes: Arabia Saudí, Pakistán, Egipto y Turquía.
El evento pretende mostrar las capacidades, profesionalidad y preparación de las Fuerzas Aéreas saudíes, al tiempo que proporciona una valiosa experiencia de combate a las tripulaciones aéreas y de apoyo en escenarios de guerra irregular y electrónica. Turquía se ha unido con cazas F-16, y Egipto ha optado por enviar sus Mirage 2000.
La selección de aviones Tornado IDS por parte de Arabia Saudí para este ejercicio es intencionada. Los Tornado IDS, conocidos por sus funciones de ataque terrestre y apoyo táctico, ofrecen ventajas estratégicas, ya que están diseñados para ser versátiles y muy eficaces en situaciones de combate complejas.
Como actor regional fundamental, Arabia Saudí está ansiosa por mostrar y mejorar su destreza militar, sobre todo teniendo en cuenta las crecientes amenazas del terrorismo y los conflictos en Oriente Próximo.
Participar en un ejercicio multinacional brinda a las Fuerzas Aéreas saudíes una valiosa oportunidad de intercambiar conocimientos y aprender de sus homólogos de las fuerzas aéreas de otras naciones. No sólo incluye maniobras prácticas, sino que los oficiales también tienen la oportunidad única de ver de primera mano cómo varios países incorporan las últimas tecnologías y estrategias en sus operaciones.
Esto es crucial para Arabia Saudí, que invierte mucho en la modernización de sus fuerzas militares y en la adaptación a los escenarios de combate contemporáneos.
Los objetivos de Arabia Saudí van más allá de la mera exhibición de su poderío militar; se trata también de reforzar las alianzas internacionales. A través de estos ejercicios, Riad desea asimilar nuevas estrategias operativas y mejorar la coordinación entre las distintas unidades militares, lo que es vital para mantener la estabilidad regional.
Arabia Saudí opera los cazas Tornado IDS [Interdictor/Strike], conocidos por sus impresionantes características técnicas. El avión mide aproximadamente 16,72 metros de longitud, con una envergadura de 14,80 metros, y mide 5,56 metros de altura.
Equipados con dos motores turborreactores RB199, pueden alcanzar velocidades de Mach 2,2 [unos 2.340 km/h] y tienen un radio de combate de unos 550 km. Estos motores proporcionan una gran potencia y maniobrabilidad, lo que convierte al Tornado IDS en un avión de ataque polivalente muy eficaz.
El Tornado IDS cuenta con un conjunto de sistemas avanzados de guiado y navegación como el GPS, el sistema de navegación inercial [INS] y el radar Doppler. Estos componentes trabajan conjuntamente para aumentar la precisión de las armas y mejorar las capacidades de navegación.
El avión está equipado con sensores térmicos y ópticos, que complementan sus capacidades de guerra electrónica. Además, está armado con un impresionante arsenal de armas, incluyendo una variedad de bombas, misiles guiados y misiles de corto alcance.
A lo largo de su vida útil, el Tornado IDS ha recibido varias actualizaciones para mejorar su capacidad de combate. Entre ellas destacan las mejoras en los sistemas de reconocimiento y control de tiro, que permiten la integración de sensores y armamento de última generación. En particular, las mejoras en la guerra electrónica y las tecnologías de navegación han aumentado significativamente el rendimiento de la aeronave en escenarios de combate reales.
El Tornado IDS saudí ha sido sometido a pruebas de combate reales, especialmente durante la Guerra del Golfo de 1991, en la que participó en numerosas operaciones y completó unas 650 salidas. A pesar de la pérdida de un avión, el éxito de las misiones puso de relieve las capacidades del Tornado IDS y reforzó la confianza de Arabia Saudí en su eficacia en combate.
Al participar en las maniobras Indus Shield 2024, Arabia Saudí exhibe sus capacidades Tornado IDS al tiempo que trata de mejorar la interoperabilidad con las naciones asociadas. El objetivo es adoptar nuevas tácticas y tecnologías que sean ventajosas para futuras operaciones militares en la región.
El comandante de las Fuerzas Aéreas, Teniente General Turki bin Bandar bin Abdulaziz, pasó revista a los equipos utilizados en el ejercicio y recibió información sobre la preparación de las tripulaciones aéreas, técnicas y de apoyo. También despidió al grupo participante cuando partió de la Base Aérea Rey Abdulaziz, situada en el sector oriental.
Las fuerzas armadas saudíes disponen de una variada gama de aviones de combate, con una notable flota de cazas y aviones de ataque. Entre los modelos clave del inventario de la Fuerza Aérea se encuentran 80 Boeing F-15 Eagles, 72 Boeing F-15E Strike Eagles, 87 Panavia Tornado IDS, 72 Eurofighter Typhoons y 83 Northrop F-5. Estos aviones son esenciales para las operaciones de la Royal Air Force, y existen planes para añadir nuevas unidades, especialmente de los modelos F-15 y Typhoon, como parte de la modernización de la flota.
Además de su actual alineación de aviones, Arabia Saudí pretende mejorar sus capacidades con nuevos pedidos. En la actualidad dispone de 84 F-15, y en el horizonte se vislumbran más entregas de Eurofighter Typhoon. La adquisición de nuevas plataformas se ajusta a la estrategia del Reino de reforzar sus capacidades de defensa, un empeño crucial dados los retos geopolíticos de la región.
Fuente: Galaxia militar
El ejercicio Escudo del Indo 2024 está diseñado para reforzar la cooperación militar y facilitar el intercambio de conocimientos entre las fuerzas aéreas de los países participantes: Arabia Saudí, Pakistán, Egipto y Turquía.
El evento pretende mostrar las capacidades, profesionalidad y preparación de las Fuerzas Aéreas saudíes, al tiempo que proporciona una valiosa experiencia de combate a las tripulaciones aéreas y de apoyo en escenarios de guerra irregular y electrónica. Turquía se ha unido con cazas F-16, y Egipto ha optado por enviar sus Mirage 2000.
La selección de aviones Tornado IDS por parte de Arabia Saudí para este ejercicio es intencionada. Los Tornado IDS, conocidos por sus funciones de ataque terrestre y apoyo táctico, ofrecen ventajas estratégicas, ya que están diseñados para ser versátiles y muy eficaces en situaciones de combate complejas.
Como actor regional fundamental, Arabia Saudí está ansiosa por mostrar y mejorar su destreza militar, sobre todo teniendo en cuenta las crecientes amenazas del terrorismo y los conflictos en Oriente Próximo.
Participar en un ejercicio multinacional brinda a las Fuerzas Aéreas saudíes una valiosa oportunidad de intercambiar conocimientos y aprender de sus homólogos de las fuerzas aéreas de otras naciones. No sólo incluye maniobras prácticas, sino que los oficiales también tienen la oportunidad única de ver de primera mano cómo varios países incorporan las últimas tecnologías y estrategias en sus operaciones.
Esto es crucial para Arabia Saudí, que invierte mucho en la modernización de sus fuerzas militares y en la adaptación a los escenarios de combate contemporáneos.
Los objetivos de Arabia Saudí van más allá de la mera exhibición de su poderío militar; se trata también de reforzar las alianzas internacionales. A través de estos ejercicios, Riad desea asimilar nuevas estrategias operativas y mejorar la coordinación entre las distintas unidades militares, lo que es vital para mantener la estabilidad regional.
Arabia Saudí opera los cazas Tornado IDS [Interdictor/Strike], conocidos por sus impresionantes características técnicas. El avión mide aproximadamente 16,72 metros de longitud, con una envergadura de 14,80 metros, y mide 5,56 metros de altura.
Equipados con dos motores turborreactores RB199, pueden alcanzar velocidades de Mach 2,2 [unos 2.340 km/h] y tienen un radio de combate de unos 550 km. Estos motores proporcionan una gran potencia y maniobrabilidad, lo que convierte al Tornado IDS en un avión de ataque polivalente muy eficaz.
El Tornado IDS cuenta con un conjunto de sistemas avanzados de guiado y navegación como el GPS, el sistema de navegación inercial [INS] y el radar Doppler. Estos componentes trabajan conjuntamente para aumentar la precisión de las armas y mejorar las capacidades de navegación.
El avión está equipado con sensores térmicos y ópticos, que complementan sus capacidades de guerra electrónica. Además, está armado con un impresionante arsenal de armas, incluyendo una variedad de bombas, misiles guiados y misiles de corto alcance.
A lo largo de su vida útil, el Tornado IDS ha recibido varias actualizaciones para mejorar su capacidad de combate. Entre ellas destacan las mejoras en los sistemas de reconocimiento y control de tiro, que permiten la integración de sensores y armamento de última generación. En particular, las mejoras en la guerra electrónica y las tecnologías de navegación han aumentado significativamente el rendimiento de la aeronave en escenarios de combate reales.
El Tornado IDS saudí ha sido sometido a pruebas de combate reales, especialmente durante la Guerra del Golfo de 1991, en la que participó en numerosas operaciones y completó unas 650 salidas. A pesar de la pérdida de un avión, el éxito de las misiones puso de relieve las capacidades del Tornado IDS y reforzó la confianza de Arabia Saudí en su eficacia en combate.
Al participar en las maniobras Indus Shield 2024, Arabia Saudí exhibe sus capacidades Tornado IDS al tiempo que trata de mejorar la interoperabilidad con las naciones asociadas. El objetivo es adoptar nuevas tácticas y tecnologías que sean ventajosas para futuras operaciones militares en la región.
El comandante de las Fuerzas Aéreas, Teniente General Turki bin Bandar bin Abdulaziz, pasó revista a los equipos utilizados en el ejercicio y recibió información sobre la preparación de las tripulaciones aéreas, técnicas y de apoyo. También despidió al grupo participante cuando partió de la Base Aérea Rey Abdulaziz, situada en el sector oriental.
Las fuerzas armadas saudíes disponen de una variada gama de aviones de combate, con una notable flota de cazas y aviones de ataque. Entre los modelos clave del inventario de la Fuerza Aérea se encuentran 80 Boeing F-15 Eagles, 72 Boeing F-15E Strike Eagles, 87 Panavia Tornado IDS, 72 Eurofighter Typhoons y 83 Northrop F-5. Estos aviones son esenciales para las operaciones de la Royal Air Force, y existen planes para añadir nuevas unidades, especialmente de los modelos F-15 y Typhoon, como parte de la modernización de la flota.
Además de su actual alineación de aviones, Arabia Saudí pretende mejorar sus capacidades con nuevos pedidos. En la actualidad dispone de 84 F-15, y en el horizonte se vislumbran más entregas de Eurofighter Typhoon. La adquisición de nuevas plataformas se ajusta a la estrategia del Reino de reforzar sus capacidades de defensa, un empeño crucial dados los retos geopolíticos de la región.
Fuente: Galaxia militar